El viernes, que fue el cuarto aniversario del bombardeo del club nocturno Pulse que mató a 49 miembros de la comunidad LGBTQ, la administración Trump finalizó una regla que eliminaría las protecciones no discriminatorias para las personas LGBTQ en lo que respecta a la atención médica y la salud. seguro.
Estas protecciones se establecieron en la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio que estableció que es ilegal discriminar por motivos de raza, color, nacionalidad, sexo, edad o discapacidad en los programas y actividades de salud. La regla Obamacare explicó que las protecciones con respecto al «sexo» abarcan aquellas basadas en la identidad de género, que definió como «hombre, mujer, ninguno o una combinación de hombre y mujer».
Bajo esta nueva regla, una persona transgénero podría, por ejemplo, que se le niegue la atención para una visita médica o que ciertos procedimientos no estén cubiertos por el seguro. La regla también podría significar que a quienes buscan un aborto se les puede negar la atención si realizar el procedimiento viola las creencias morales o religiosas de los proveedores. Para las personas transexuales negras, son capas de opresión: es transfobia además del racismo además de la opresión económica.
Nos oponemos firmemente a esta regla espantosa y estamos trabajando con nuestros funcionarios electos a nivel federal para evitar que esto suceda. La mejor manera de detener esto es votando en las elecciones de noviembre.
La buena noticia salió ayer del Tribunal Supremo. En una votación de 6-3, la Corte reafirmó que la Ley de Derechos Civiles de 1964 protege a las personas LGBTQ de la discriminación en el lugar de trabajo. En más de la mitad de los estados de Estados Unidos, hasta ahora te podrían despedir por ser gay o transgénero. Una persona gay o trans podría casarse un domingo y despedirse de su trabajo el lunes. Celebramos este fallo histórico, pero hasta que nuestras leyes remedien el racismo y la desigualdad sistémicos, hasta que ya no sea legal discriminar a la comunidad LGBTQ en espacios públicos, nuestro trabajo está lejos de terminar.
Siempre hemos creído que cada ser humano tiene derecho a la atención médica y seguiremos luchando por ese derecho en todos los niveles de gobierno.
